¿Tu empresa tiene una crisis de reputación corporativa?
La reputación empresarial es uno de los activos más importantes, que se puede perder de forma inmediata por un error o lentamente sin que te enteres.
Es posible que todavía no lo sepas, pero la reputación de tu empresa puede estar en caída libre y cuando te enteres será demasiado tarde.
La reputación corporativa se refiere a como el mercado percibe a tu empresa en cuanto a sus valores corporativos, tales como:
- La calidad de los productos y servicios que ofreces.
- La honestidad y ética empresarial en sus acciones.
- Cumplimiento de ofertas y compromisos.
- Niveles de innovación.
- Calidad de la comunicación.
- Condiciones de trabajo de sus colaboradores.
- Infraestructura física y tecnológica.
- Responsabilidad social y ambiental.
- Gestión de problemas.
La imagen de tu empresa es uno de los activos intangibles más importantes. Está al mismo nivel de importancia que el nombre y la imagen de marca, por lo que es de vital importancia posicionarla correctamente en el mercado para generar la confianza y la demanda que permita un crecimiento económico sostenido.
¿Cómo detectar que la confianza en tu empresa está en riesgo?
Las ventas están cayendo o se te dificulta atraer nuevos clientes. Adicional a los desafíos naturales de competir en el mercado, las malas decisiones relacionadas con la disminución de la calidad de los productos y servicios que ofreces, el incumplimiento de garantías y promesas, deficiente servicio al cliente, demoras en el servicio técnico y el incremento de precios provocan la pérdida de confianza de los clientes.
Tienes dificultades para contratar y retener a los mejores profesionales. Si tu empresa tiene una mala reputación difícilmente querrán trabajar en la misma.
Las malas prácticas laborales y el incumplimiento de las promesas de contratación tarde o temprano te pasarán factura.
La pérdida de confianza de tus proveedores ocasiona que no quieran trabajar con tu empresa.
Interponen cualquier excusa y en caso de que accedan, exigen ciertas condiciones como la reducción de los tiempos de pago, menores montos de crédito, garantías de pago y un pago de entrada mayor.
La publicidad negativa se esparce rápidamente a través del boca a boca, con comentarios bastante negativos sobre tu empresa y solo te enteras cuando aparecen continuamente en redes sociales, cuando ya es bastante tarde para intentar corregir cualquier error.
La pérdida de confianza y de la imagen corporativa por lo general no surge de la noche a la mañana.
Es consecuencia de un pobre liderazgo y malas decisiones que se vienen tomando desde hace tiempo atrás, por lo es difícil darse cuenta de que estamos sumergidos en una crisis de reputación.
Adicionalmente existe una resistencia natural a reconocer esta crisis por cuestiones de orgullo y reputación personal, lo cual la agrava más.
Existen varios factores que te pueden ayudar a identificar si tu empresa tiene una crisis de reputación o la está iniciando.
¿Cómo cuidar y recuperar la imagen empresarial?
La reputación de una empresa va mucho más allá de una campaña de comunicación, publicidad y discursos. Es lo que se hace día a día con los clientes, colaboradores y el mercado en general.
Restaurar la reputación es un proceso lento y costoso (no siempre se logra), así que es mejor que la empieces a cuidar desde ahora, por lo que es recomendable realizar periódicamente un estudio para determinar cuál es el nivel de reputación de tu empresa. Esto incluye:
Pregúntale a tus clientes sobre cómo perciben la empresa, sus instalaciones, productos y servicios, publicidad y comunicaciones.
Como te comparan con la competencia con respecto a precios, calidad, productos y servicios, valores agregados y personalización de tu oferta. Que mencionen cuáles han sido sus experiencias interactuando con la empresa.
Realiza una encuesta de clima laboral a tus colaboradores donde se cuestione el liderazgo, calidad de vida, trato recibido, oportunidades de crecimiento, satisfacción laboral, procesos de comunicación, etc.
Adicionalmente recoge los comentarios que los colaboradores hayan recibido por parte de los clientes.
Recuerda que los colaboradores son los primeros en detectar cualquier crisis de reputación, por el contacto directo que tienen con los clientes. Ellos son los principales embajadores de tu empresa.
Explora las estrategias e inversiones de los principales competidores.
- ¿Qué están ofreciendo y cómo lo hacen?
- ¿Cuáles son sus procesos internos, nivele de satisfacción de sus clientes y colaboradores?
Descubre cuáles son sus mejores prácticas empresariales, cópialas y mejóralas.
Con esta información podrás corregir muchos errores y diseñar nuevas estrategias para mantener o recuperar la confianza e imagen en el mercado.
Es un proceso en el cual hay que trabajar todos los días y deben participar todos los ejecutivos de la empresa.